Existen diferentes formas de calmar los síntomas de la sinusitis. Desde la toma de antibióticos, la aplicación de agua de mar esterilizada, hasta un lavado nasal para sinusitis casera, como la aplicación de la solución salina para sinusitis. Cada forma tiene su adecuada aplicación con fines más específicos y eficientes.
El lavado nasal calmará los síntomas de congestión nasal propios de la sinusitis, como complejidad nasal, sensación de cara hinchada (por llenado de moco nasal en las fosas nasales de la quijada) y cefalea.
No obstante, a efectos más veloces y más eficientes, el lavado nasal debe hacerse mediante determinados cuidados y procedimientos para conseguir el máximo partido de ello. Se aconseja que mientras que sufra sinusitis fomente el lavado nasal entre dos y tres veces al día, mas no de todas formas, hay que hacerlo adecuadamente.
Método para un buen lavado nasal
Para que logre la mayor eficiencia posible del lavado nasal y alivie los síntomas de la sinusitis lo antes posible debe emplear la solución salina para sinusitis, poniendo ciertas gotas en las fosas nasales, mas si sostiene la nariz baja, la solución sale de la nariz en vez de actuar en las fosas nasales.
¿De qué manera se aplica el lavado nasal?
1) Incline la cabeza cara atrás.
2) Con un gotero, colóquese unas gotas en todos y cada agujero nasal.
3) Apreciará las gotas de la solución corriendo cara las fosas nasales, sintiéndolas correr cara la zona de la garganta.
4) Cuando la solución llegue a la nariz, no se trague, puesto que va a estar contaminada con las bacterias de la sinusitis. Procura expulsarla tras el esputo. Al aplicar la solución de esta manera, la mucosa nasal va a salir más de forma fácil y la sensación incómoda de obstrucción nasal va a desaparecer y va a respirar más sencillamente.