La cistina es un aminoácido cristalino que contiene azufre formado desde 2 moléculas del aminoácido cisteína.
Este aminoácido puede transformarse en cisteína por reducción (en un caso así, la adición de hidrógeno). Descubierta en mil ochocientos diez, la cistina no fue reconocida como componente proteínico hasta mil ochocientos noventa y nueve, cuando fue apartada del cuerno animal.
Es particularmente rebosante en los tejidos esqueléticos y conjuntivos y en el pelo. Solo se halla en ciertas proteínas en comparación con los aminoácidos proteinogénicos que se hallan en la mayor parte de las proteínas en el humano.
Alimentos fuentes de cistina:
Algunos de los alimentos con más altas dosis de cistina son:
- brócoli
- pimentón
- ajo
- cebolla
- carne
- huevos
- pescados
- nueces
- semillas de girasol
- soja
Aparte de estos alimentos, el aminoácido puede encontrarse en otros géneros de comestibles.
Beneficios de la cistina
Ganancia de músculos
Este aminoácido asimismo es quien se encarga de los bloques que fabrican proteínas. Los músculos están constituidos esencialmente por fibras proteicas. En consecuencia, el consumo conveniente de este aminoácido asimismo puede asistir a acrecentar la fuerza y la masa muscular.
Mejora la salud del cabello:
Este aminoácido, así como las vitaminas Y también, vitamina C y selenio, ayuda a prevenir enfermedades relacionadas con la piel, sosteniendo los genes de defensa unidos y también impidiendo la acción de los rayos ultravioleta sobre el ADN humano, que puede provocar cáncer de piel.
Resguarda tu cuerpo:
El consumo regular de cistina como vitamina alimenticia es una fuente considerablemente más segura que la metionina. Eso es por el hecho de que ayuda a sostener los niveles convenientes de glutatión y ayuda a resguardar el organismo y el cuerpo.
Deficiencia de cistina:
La deficiencia de este aminoácido puede provocar fatiga, pérdida de pelo, uñas débiles, agobio e inclusive perjudicar al sistema inmune.